dsantos escribió:Ebpjmm tiene toda la razón. Ya lo dije en la página anterior.
El toro de lidia, también denominado toro bravo, designa a los especímenes macho de una heterogénea población bovina desarrollada, seleccionada, y criada para su empleo en diferentes espectáculos taurinos, como las corridas o los encierros. Proceden de las razas autóctonas de la península ibérica, conocidas como «tronco ibérico», que desde tiempo inmemorial propiciaron las formas más primitivas de tauromaquia.
Si la especia se llama toro de lidia es por algo. Obvio que seguiría habiendo toros, pero la especie toro de lidia desaparecería, es así.
A pesar de no estar de acuerdo por las muchas y variadas razones que han dado los compañeros de post y pareciendome una barbarie, pues respeto a los que les guste, pero no hablemos como si algo fuera lo que no es.
Los toros de lidia no son ninguna especie, ni lo han sido nunca, al menos en lo que a zoologia se refiere.
Aqui viene perfectamente explicado :
http://www.animanaturalis.org/704A modo de corto resumen, me quedo con esto:
" En definitiva: los toros de lidia actuales no son sino animales mestizos que no pertenecen a ninguna raza determinada, y sólo para fijar un concepto que sirva de referencia, me permito definirlos como "animales pertenecientes a diversas pseudorrazas de Bos taurus, con la característica frecuente, indefinible científicamente, de manifestar una agresividad instintiva cuando son provocados o acosados", característica que comparten con otros muchas especies e incluso con ejemplares de otras razas bovinas".
Y sobre su desaparicion si no existieran las corridas de toros, para quien no quiera leer todo el articulo, lo siguiente:
¿Son los taurinos sinceros cuando se preocupan de su posible desaparición?
Es evidente que a los taurinos lo que les preocupa es la desaparición de las corridas, no de los toros: a unos, los simples aficionados, porque perderán su divertimento; a otros -ganaderos, críticos, matadores, etc.- porque perderán su negocio. Pero ni a unos ni a otros les interesa la suerte de las pseudorrazas de lidia. Y para hacer esta afirmación me baso en las siguientes evidencias:
Muchas pseudorrazas se han perdido ya y otras se seguirán perdiendo, de forma provocada, y no por ello ponen el grito en el cielo [10].
Varias razas bovinas autóctonas (verdaderas razas) han desaparecido en estos últimos años (campurriana, pasiega, lebaniega, etc.) y otras muchas se encuentran en peligro eminente de desaparición (albera, blanca cacereña, cachena, murciana, etc.) y no son precisamente los taurinos los que destacan pidiendo su protección.
¿Desaparecerán las pseudorazas de lidia cuando desaparezcan las corridas?
Los toros bravos no existen porque existan las corridas, sino al revés: las corridas existen porque existían toros bravos. Recordemos que los primitivos ganaderos de bovino intentaron durante siglos erradicar ese carácter de bravo de entre su ganado, seleccionando a los animales más mansos y, por tanto, más manejables. Y aun así, en el siglo XVIII los primeros ganaderos de reses para lidia se encontraron con ejemplares cuyo gen de bravura no había desaparecido. Todavía hoy existen ejemplares entre las ganaderías de toros de carne, que manifiestan una instintiva agresividad cuando son acosados o provocados [11]. No hay, por tanto, motivos para dudar de que dicho carácter se perpetuará aún durante mucho tiempo, de forma natural, sobre todo si no se selecciona en sentido contrario.
Por tanto es primordial velar por la conservación de las razas bovinas autóctonas españolas, verdadera riqueza zoológica y zootécnica de nuestro país, antes que por las pseudorrazas de lidia. Se calcula que el 32% de las primeras se encuentran en inminente peligro de desaparición, y el 38% en peligro moderado de desaparición [12].
En cuanto a las pseudorrazas de lidia, con un valor ecológico mucho menor que las anteriores, su supervivencia a las corridas es un simple problema de voluntad. De momento habría que decidir qué fenotipos se desean perpetuar para impedir a los ganaderos que continúen haciéndolos desaparecer. No olvidemos que el propio negocio taurino es en estos momentos su peor enemigo. Una vez establecidos los caracteres diferenciadores de la raza de lidia, sólo deberían ser inscritos en el Libro Genealógico de la Raza Bovina de Lidia los ejemplares que los tuvieran, y en pocos años ya sí podría hablarse de la raza de lidia.
Y existiendo una raza de lidia, su protección en dehesas al efecto sería económico y sencillo. Mucho más que la protección de otros animales en peligro de extinción (como linces, lobos u osos [13]) que se ha mostrado posible.
Y tampoco hay que olvidar que, incluso sin ser utilizados para la lidia, las actuales pseudorrazas de lidia son económicamente rentables como productoras de carne, o al menos tan rentables como muchas razas españolas de cría extensiva [14]. Es decir, son una verdadera alternativa de producción para terrenos que no permiten mantener otras razas más delicadas, aunque su manejo resulte mucho más complicado.
En resumen: las pseudorrazas de lidia no tiene porqué desaparecer si las corridas fueran abolidas, y no hay duda de que quienes ahora abogamos por su abolición seríamos los que a partir de entonces lucharíamos por la protección de tan bellos y magníficos animales.
Autor: Luis Gilpérez